Cercanía del lago

Camine lentamente desde mi casa hasta la entrada del colegio, mas no entre, me gire hacia direccion contraria y fui hacia el lago. Alli, en esa extensa masa de agua, me vi reflejada, tenia los ojos como de un felino, de un color amarillo carmesí, mi rostro carecia de esa habitual y sonrojada exprecion de niña buena, parecía mas adulta, me sonrei a mi misma por eso, me gustaba verme asi. pero lo que le habia dicho a Hang Ha, era verdad, lo sabia, sabia que me odiaria un buen tiempo por esto, pero debi hacerlo. debia colocarla en esa posicion, solo ella puede encontrar a Ra Im.
 :!:  ES VERDAD!
De la mochila saque el silbato que usaba cuando queria hablar con keun yong-i  tal vez él pudiera averiguar si Ra Im escapo al bosque..

El arbol que estaba cerca de donde yo estaba comenzo a moverse con el viento. Al observarlo pude entender lo que queria decirme. - Si, lo se, pero aun sigo sintiendome una inutil.De pronto el viento fue mucho mas fuerte y las hojas se desprendieron del arbol.-OTOSAN!Algo le habia ocurrido, lo habiamos dejado tan solo. mire el lago y pequeñas ondas se dirigian hacia la sala, alli estaba él.
sali corriendo de alli

Esa mañana despertó y se preparó, había llegado el momento de ir al pueblo y enfrentarse a la verdad... tendría que recuperar por sí misma sus cuernos de una manera u otra. Pero todos la conocían como el ser misterioso y místico del bosque, si aparecía la atacarían, así que decidió tomar su forma de niña. Con esa forma nunca nadie intentó dañarla, pero de todas maneras debía estar atenta a todo lo que ocurría.

Su lago discurría a lo largo de todo el bosque y cerca de el pueblo se formaba un lago para luego seguir su camino hasta el mar, así que lo siguió lentamente hasta llegar a ese lugar. Le gustaba ir allí porque podía ver a los niños, estos eran más honestos que los mayores, pero también mucho más crueles y no quería acercarse todavía. Respiró profundamente y se colocó su largo pelo rubio casi blanco sobre su hombro derecho, alzó sus manos para tocar su cabeza y se aseguró de que sus cuernos habían desaparecido, mejor no arriesgarse. No estaban allí, así que había llego el momento de respirar profundo y arriesgarse... hacía años que no se arriesgaba de esa manera, ya no era tan joven y no estaba a gusto con aquello, aunque no lo pareciera.

Se colocó el vestido despacio y caminó despacio sobre el agua congelada del lago, nadie debería verla, nadie debería estar allí a esas horas, pero no esperaba ver a la chica pelirroja mirándola asustada desde el borde del lago. Ahora era una niña supuestamente así que se acercó despacio hacia donde se encontraba y suspiró cerrando los ojos despacio llegó hasta donde se encontraba. Sabía que debía decir que tenía frío, que su piel debería estar roja por el roce de la nieve, pero era agua y ella un dragón de agua... eso no podía dañarla, es más, le daba poder. Ladeó la cabeza al verla y se lamió los labios sin llegar del todo a salir del agua congelada- Hola... -murmuró sin saber qué más decir.

Genial... ¿Ahora qué podía decir? se sorprendió bastante cuando la tomó en brazos de aquella manera, nunca nadie la había tomado así desde su madre, la gran dragona ¿Cuánto tiempo hacía de eso? más de diez siglos. Sin darse apenas cuenta su cuerpo se encorvó un poco y se acopló al de el más crecido, no podía decir que era más mayor cuando hacía más de un millón de años que había nacido. Respiró profundamente y soltó el aire despacio mientras se dejaba hacer por ella. Bueno, ahora tenía que mentir, tenía que inventarse una historia que satisfaciera a la mujer, después de todo ahora debía vivir en el pueblo para poder buscar adecuadamente aquello que había perdido- No se qué a pasado...- había escuchado que los humanos cuando sufrían olvidaban así que no debería de ser raro- sólo sé que estaba por allí- señaló hacia el bosque, el lugar donde había parecido sobre el lago- y vine andando... creo que no tengo papás...

Eso era verdad, su madre había muerto y su padre... bueno no conoció jamás a su padre, otro dragón debía haberse apareado con su madre pero jamás le habló de él. Bajó la vista hacia sus pies donde ahora tenía metidos los pies y los movió de forma graciosa, parecía que llevaba puesto un gran vestido de tela abrigada. No tenía ni frío ni calor, la humedad en el aire permitía que pudiera dirigir su temperatura corporal como deseara, estaba nevando, mientras siguiera así tendría tanto poder como cuando estuviera cerca del río, pero no podría utilizarlo así como así mientras estuviera así. La mujer estaba temblando, tenía frío, pero el viento venía del bosque así que discretamente colocó su mano sobre un montoncito de nieve, cerró los ojos dejando que su mente siguiera el curso del agua hasta que utilizó su poder para formar un gran muro de nieve y hielo que tapara el aire que venía hacia donde ellas se encontraban, al rededor seguía pero allí, en ese punto, por lo menos el viento no la dañaría.

- Sabía que tenía que venir aquí porque escuché cosas- esperaba que aquella historia, o sucedáneo de ella, pudiera contentarla por el momento, más adelante formaría una historia mucho más creíble y lo suficientemente firme como para que no hurgaran mas en él. Si veía que no calaba como deseaba utilizaría uno de sus poderes, sus ojos cuando brillaban hipnotizaban a los humanos, pero sólo si ella lo deseaba. Negó con la cabeza un par de veces para que la nieve que caí resbalara y no se acumulara- ¿Podemos ir a algún sitio? la nieve no deja de caer- ladeó la cabeza suavemente como si fuera completamente adorable e inocente, como si no supiera cosas de la tierra, del universo, que harían perder la cordura a la mayoría de los humanos, como si ella no fuera uno de los seres más ancestrales del bosque, como si cientos de artistas no hubieran intentado captar su esencia a lo largo de la historia, tanto en su forma infantil como mayor.

Off:

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Pasé por el colegio a buscar a mi pequeña. Tenía la sensación de que este día ya lo habia vivido... ladee la cabeza algo confusa.  Ren se encontraba en el trabajo, aunque era el dueño le gustaba estar cerca de sus clientes y por lo mismo iba como cualquier empleado.
 Estaba algo inquieta, no estaba muy clara  de lo que en este día sucedería puesto que se me mezclaban cosas, no sabia si ya lo había vivido o si solo era malos juegos de mi cabeza a causa del cansancio. O lo que se conoce como "Dejavu".
Comencé a hacer memoria,   lo había visto hace unos meses, mas sin duda hoy seria ese día ya que mi corazón estaba mas inquieto de lo normal. Podía sentir mi palpitar en mi garganta. 
 Como atraída por magia, caminé llevando a mi hija en brazos, mi pequeña Sook que cada día crecía a una velocidad que me desconcertaba a ratos.
Pasados unos minutos mi bebé pidió que la bajar, tomé su manito y caminé a su paso.
Avancé y la vi, la reconocí de inmediato, no había cambiado nada... .-O..Omma... Dije con mi vos desvanecida y temblorosa como nunca antes.

Sentía como si la respiración se me hubiese cortado, mi corazón latía tan fuerte que pensé que saldría de su lugar. Ella me observo con emoción y cuando me reconoció como su hija, no pude mas que llorar y asentir con un movimiento de cabeza a la par que la veía llevar su mano al pecho y rodar lagrimas por sus mejillas. Tomé  a mi hija en brazos y corrí hacia mi madre abrazándola. .- Bogoshiposso Omma, bogoshiposso... fue lo único que pude decir.

Ommañi era tan dulce, nos cubría con la bufanda que traía puesta, me mantenía entre sus brazos y me acariciaba. Me vio y se preguntaba como podía ser yo tan bella... .-Gracias a usted es, usted es mas bella O.. ommañi...
Sonreí y luego bajando de mis brazos a Sook.. .-Ella es mi hija, Sook.  se la presenté.

Esto no terminaría así, yo no estaba dispuesto a estar encerrado el resto de mi vida en una asquerosa cárcel mucho menos sin vengarme de todos los que hicieron que me encerraran, sobre todo esa chica igual a Hang Ha, por fin logré comprender porque ella parecía no temerme, pero ella me pareció mucho más valiente e inocente, no la dejaría escapar pude haber perdido a Hang Ha pero a esa versión de ella del otro mundo no, pero para eso primero debo escapar de esta asquerosa patrulla. AAAAAHH! NO AGUANTO MAAAAS , DESGRACIADOS AYÚDENME, ME DEJARÁN MORIR ASI?? AAAAAHH!!
Traje a mi memoria la apariencia de uno de los malditos que me llevaban detenido, comencé a gritar con mi cambio físico, más que nada para lograr que los bastardos detuvieran el auto y lo conseguí, tan pronto abrieron la puerta ya lucia cómo el detective  [Tienes que estar registrado y conectado para ver este vínculo]  tan pronto se acercó el tarado del policía lo rodeé con mis piernas haciendo presión en su cuello estrangulandolo.Abre las esposas o le rompo el cuello con un solo movimiento. Estaba decidido, yo no iría a la cárcel.

El imbécil soltó las esposas y su arma, tan pronto lo hizo, tomé el arma que el idiota del guardián traía entre su ropa. Con la misma le apunté en la.cabeza y le rodeé el cuello con mi brazo.Dame tú arma. ordené al detective ya que si bien dejó a un lado el arma cuando se lo pedí la mantenía cerca de él. Tan pronto me la entregó bajé de la patrulla apuntando al guardián aún y presionando su cuello con fuerza con ayuda de mi antebrazo.Ponte las esposas Ordené al detective y tan pronto lo hizo lo terminé de esposar en la parte trasera del auto de la misma forma en que ellos me traían anteriormente, hice lo mismo con el guardián y a ambos le cubrí la boca además de armarles los pies. Con la culata del arma les golpee la cabeza a cada uno y los desmayé.Tomé las llaves de la camioneta y manejé rumbo al bosque.
Habían transcurrido unos 30 minutos, tan pronto estuve lo suficientemente cerca de mi escondite me bajé del vehículo y disparé a las ruedas de éste así si recibían ayuda tardarían en salir del lugar, destruí sus móviles y finalmente me marché a preparar mi venganza, mis planes habían tenido un giro inesperado por causa de alguien inesperada por lo tanto las cosas no podían terminar así.